miércoles, 22 de marzo de 2017

Un evento inesperado

Realmente nunca pensé que iba a existir esta sección en el blog, la de "Momentos Personales", pero el sábado pasado me ocurrió algo muy raro, que pensé no me iba a suceder nunca, al menos de esa manera. Necesito contarlo y este es el único medio por el que puedo hacerlo.


El fin de semana pasado nos fuimos de viaje con unos amigos a una ciudad en las montañas y a la noche salimos a un boliche. Casi la totalidad noche transcurrió con normalidad. Un rato antes de terminar la joda vi un grupito de chicos de los cuales algunos me parecieron gay. Y ojo acá no estoy prejuzgando ni nada por el estilo, creo que está claro que soy el último que haría eso, je. Pero uno se da cuenta, los que son gay me entenderán. En fin, obviamente ante ese descubrimiento no podía hacer nada, ya que como dije muchas veces, nadie conoce mi verdadera orientación sexual. Pero de a poco mis amigos empezaron a irse y ahí comencé a pensar que si este grupo de chicos se quedaba hasta el final, yo podía esperar a que se fueran todos mis amigos y ahí tener unos minutos como para aprovechar el momento. Igual sabía que era difícil, porque aún dándose esto, debería ir a hablar con uno del grupo y averiguar de alguna manera si realmente el era gay, para recién después decirle que yo también lo soy. Y aún después de todo esto, resolver mi conflicto interno y vencer el miedo para darle un beso. Por eso, en el momento en que imaginé todo esto, supe que era una misión imposible.

A 15 minutos de que el boliche cierre, quedaban solo 3 amigos míos (al principio eramos mas de 10). Veo que los 3 dicen que van al baño y yo me quedo esperándolos en la pista. Cuando salen, en vez de volver, cruzan la puerta y se van para afuera también. No puedo explicar la adrenalina que corrió por mi cuerpo en ese momento. Se había dado todo lo que no estaba a mi alcance y ahora venía lo más difícil pero con la diferencia de que ahora sólo dependía de mi. Tenía mucho miedo, muchísimo, pero sabía que si iba a hacer algo tenía que apurarme, no podía ponerme a dudar. Evidentemente todo el alcohol que había ingerido influyó en la decisión. Me acerqué a uno de los chicos que justo se había alejado del grupo (20 años, este mismo un rato antes me había convidado un trago, pero sólo eso) y le dije el "¿Todo bien?" más nervioso de mi vida. Me respondió esto (la conversación tal vez no sea exacta, porque el alcohol también influyó en mi memoria, je. Pero fue mas o menos así):
El: - Si loco. Mirá, todas esas chicas de ahí están buscando algún hombre que las vaya a encarar, porque todos sus amigos son gays.
Yo: - Ah mira vos... Pero a lo mejor yo no busco eso.
El: (Sorprendido)
Yo: - ¿Vos alguna vez besaste un hombre?
El: Yo soy bi.
Y ahí me di cuenta de que era "ahora o nunca". En 5 segundos le expliqué que yo era gay, que nunca había besado a un hombre, que ninguno de mis amigos lo sabía pero que ya se habían ido todos. El evidentemente se dio cuenta de mis intenciones y me preguntó: ¿Me decís esto porque querés besarme? Mis nervios en ese momento llegaron a un punto extremo, sólo me dejaron asentir con la cabeza sabiendo lo que se venía. "Vení" me dijo y me empezó a besar. No creo que hayan sido mas de 6, 7 segundos, pero a mi me pareció una eternidad. Ahí estaba yo, en el medio de la pista de un boliche besando a otro hombre, algo totalmente impensado para mí hasta ese momento. Nunca algo me había hecho tener tantos sentimientos encontrados al mismo tiempo: placer, miedo, felicidad, nervios. Nos separamos, los dos con una sonrisa cómplice, le pregunté su nombre para buscarlo en Facebook, me contestó, lo saludé, volvimos a besarnos unos segundos más y sin decir más nada me fui. Y lo más increíble es que hice 5 pasos y apareció un amigo mío que entraba a buscarme. No exagero, no fueron mas de 3 segundos, evidentemente el destino quería que no me viera nadie.

Esa es la historia del beso que tanto esperé durante toda mi vida. Y más allá de que me hubiera gustado disfrutarlo más, sin duda alguna fue el mas intenso.


Buenas noches.